La Buena Musicalidad asistió como medio acreditado al concierto de Rozalén del pasado sábado 8 en el Auditorio Parque Almansa de San Javier (Murcia). Acompañada de su banda y como no, de Beatriz Romero (quien se encarga de traducir al lenguaje de los signos las letras de las canciones), dio un espectáculo de buena música y sobre todo de mucho humor.
Rozalén fue desgranando su primer disco 'Con derecho a...', y además cantó algunos de los nuevos temas que irán incluidos en su nuevo álbum 'Quien me ha visto...'.
'Para los dos'y 'Susurros de papel' eran los primeros temas con los que la artista empezaba el concierto.
Prosiguió con 'Las hadas existen', que antes de empezar, pidió que se bajaran los niños a pie de escenario, para cantarles de cerca dicho tema. Tan de cerca quiso cantarles, que Rozalén se bajó del escenario para mezclarse entre los niños y algunos adultos.
Continuó con 'Ahora', una de sus nuevas canciones, que va en el tracklist del nuevo disco.
Interpretó de manera muy respetable, la canción 'La belleza', de Luis Eduardo Aute. La versión que hace la artista de este tema, también irá en el nuevo disco.
Rozalén deleitó a los presentes con su sentido del humor e hizo reír al público en incontables ocasiones. Una de esas ocasiones, fue antes de interpretar 'Cal y arena'.
Llegaba el turno de 'Será mejor', otra nueva y pegadiza canción, que se podrá disfrutar en el segundo disco de la artista.
Tocaba volver a rememorar los temas del primer disco, con 'Bajar del mundo' y una coreada '80 veces'.
No podía faltar el precioso nuevo single que la artista está promocionando... 'Vuelves'.
Para finalizar el concierto, Rozalén dejó para el último momento, 'Saltan chispas', donde la gente acabó bajando a pie de escenario que fue el colofón a un espectáculo ameno e increíble.
La cantante se metió al público en el bolsillo, cantó como ella sabe hacerlo e interpretó de forma contundente cada tema.
El setlist que la artista tuvo para el concierto, fue muy completo y variado. Ofreció un espectáculo que fue una delicia.
Su buena música, combinada con la bonita iniciativa de la traducción al lenguaje de signos por parte de Beatriz Romero, sumando la gran carga humorística con la que deleita al público, además de tener una banda que hace que cada tema se disfrute al máximo, queda como resultado un concierto inolvidable que despierta ganas inmensas de disfrutar más veces del 'Mundo Rozalén'. Un mundo al que recomendamos que os sumerjáis.
Rozalén es una de esas artistas a las que hay que pararse a escuchar y sobre todo, a sentir su talento en directo, porque merece la pena.
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